
30 Jul Entre el vino divino y el paladar cateto
He estado 26 años al frente de la bodega de un restaurante, donde he descorchado muchísimas botellas, he visto pasar por mis manos más de 4.000 referencias diferentes, he conversado con todo tipo de clientes y he vivido alguna que otra aventura en este apasionante mundo del vino.
El vino es un universo por descubrir, lleno de matices, sabores, recuerdos, experiencias, historias, un mundo en el cual cada día se aprende algo, donde cada año es diferente al anterior y al posterior, y donde también hay una fauna variopinta de personajes, desde exploradores intrépidos de viñas que te relatan hazañas épicas de catas en lugares remotos, son como Indiana Jones con copa, sin miedo a lo desconocido y siempre buscando el Santo Grial vinícola. Te cuentan de vinos exóticos con aromas que ni siquiera imaginabas y te abren la mente a un mundo de posibilidades. Generalmente humildes y siempre dispuestos aescuchar, a contar y a probar cosas nuevas sin prejuicios.
También están los sabios populares del vino, personas que no han estudiado en una escuela pero que toda una vida entre viñas, vendimias, cambios de tiempo y experiencias hacen que tengan una cultura y un conocimiento bestial.
¡Únete a la cruzada por un mundo vinícola más abierto y tolerante!
Hay gente que ha estudiado muchísimo, que se ha preparado, estudios de enología, viticultura, sumillería, y que ha probado muchísimo vino en su vida, y cuando digo mucho vino no quiero decir litros y litros del mismo tipo de vino, quiero decir estilos, tipos, elaboraciones, regiones, etc., también hay gente que simplemente es aficionada a la cultura del vino y a todo lo que le rodea.Y con todo este tipo de gente da gusto charlar, probar vinos, compartir conocimientos y sobre todo escuchar y hablar desde la humildad, es la única manera de aprender.
¡¡¡¡¡¡Luego están los dogmáticos pueblerinos, Bufffff!!!!! estos personajes son como un Crucifijo, siempre tiesos y con la misma cantinela. Creen que el vino de su pueblo es el néctar de los dioses y desprecian cualquier otra etiqueta. Frases como «he estado pasando el puente en Burdeos y la verdad es que vaya vinos, cualquier vino de aquí está mucho mejor, y que precios» sin jamás pararse a pensar que igual y solamente igual no han tomado un buen vino y ya, como puede pasar en cualquier sitio del mundo, o que simplemente tus conocimientos de vino no alcanzan para entender muchos de los vinos que se hacen en el mundo, a veces, “los vinos de esta región son mundialmente conocidos por su calidad”, a veces ese provincianismo nace desde las instituciones que realmente no son o no quieren ser objetivos. Te dan ganas de sacarles un corcho y descorcharles la mente.
Durante años he ido recopilando perlas de sabiduría popular vinícola: frases que te hacen sangrar los oídos, barbaridades que rayan en lo absurdo y comentarios que te dejan con la boca abierta. Son como un museo del horror de la cultura vinícola, donde cada frase es una obra maestra de la ignorancia, Son cápsulas de humor ácido para recordarnos que, en el mundo del vino, como en la vida, la humildad es la clave.
Estas frases son una oda a los paladares curiosos, a los exploradores de sabores y a la capacidad de reírnos de nosotros mismos. ¡Brindo por aquellos que no se tragan dogmas y que navegan por el mar del vino con mente abierta y corazón alegre! ¡Salud!
Puedo dar mi palabra que todas estas frases que iré poco a poco contando, son literales, ninguna de ella ha sido modificada, son tal cual.
- 25 de Julio de 2018: – “Los vinos franceses huelen mejor que saben”
- 1 de Diciembre de 2016: – “Vino Alemán? Desde cuando hacen vino blanco en Alemania, con ese frio que hace estarán malísimos”
- 4 de agosto de 2022: – “La fermentación del vino crea azúcar, por eso existe el champagne”
- 3 de junio de 2022: – “Sabes en que se diferencian un Ribeiro y un Albariño? la única diferencia es que el Albariño es de costa y el Ribeiro de interior” esta fue una conversación que oí, no me lo dijeron a mi directamente.
P.D. Si te reconoces en alguna de estas categorías, no te ofendas. ¡Solo tómalo con humor y únete a la cruzada por un mundo vinícola más abierto y tolerante!